El offshoring es la relocalización que realiza una compañía cuando traslada sus sistemas de producción a otros países más competitivos donde los costes de materias primas y laborales sean más baratos.
En sus incios solo se realizaba en actividades relacionadas con la producción, pero hoy en día ya se están relocalizando actividades de mayor valor añadido para la empresa.
Algunas ventajas de la relocalización
- Aumento de la flexibilidad y habilidad para adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado.
- Reducción de costes.
- Apertura de nuevos mercados, lo que implica una oportunidad de incrementar ventas en esa nueva región.
Algunas desventajas de la relocalización
- La diferencia de culturas puede crear confusión y conflictos.
- Riesgo o sensación de pérdida de control.
- El desconocimiento de cómo implantarse en una nueva región puede provocar que determinadas inversiones no sean rentables, o no tanto como esperábamos.
- Conseguir empleados muy cualificados para determinados puestos en ocasiones puede resultar difícil por lo que podría perderse calidad en la producción.
- Dificultades para en un futuro internalizar las funciones que se han subcontratado.