Este término se acuño en el 2004 cuando Chris Anderson, escribió un artículo titulado “The long Tail” (La larga cola) en la revista Wired Magazine.
Anderson en este modelo de negocio propone la existencia de dos tipos de mercados. El antiguo mercado de masas, que se centra en el rendimiento de unos pocos productos para una gran mayoría de personas ( por ejemplo los “best sellers”) y el nuevo nicho de mercado, que se basa en pocas ventas de muchos productos. Es decir, muchas ventas puntuales (suma de pequeños ingresos procedentes de una gran cantidad de artículos) pueden generar un total de ingresos superior a los obtenidos con productos denominados éxitos de ventas.
Anderson apunta a tres factores desencadenantes de este fenómeno:
- Democratización de las herramientas de producción: La caída de los precios de la tecnología nos da acceso a herramientas que, hace solo unos años, eran de acceso muy restringido.
- Democratización de la distribución: Internet ha hecho accesible a todos la distribución de contenido digital, ayudando a disminuir los costes relativos al almacenamiento, las comunicaciones y los precios de las transacciones. De este modo se han ido abriendo así nuevos mercados para productos nicho pudiendo ofrecer una alta gama de productos para una amplia variedad de personas.
- Disminución de los costes necesarios para conectar la oferta con la demanda: Los motores de búsqueda y recomendación existentes hoy en día, junto con las comunidades sociales han hecho esto proceso mucho más rápido y eficaz.